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  • Luz Marus

Juan Gatti en el Palais de Glace



Hasta el 5 de noviembre estuvo la muestra de Juan Gatti en el Palais de Glace. Fue una de esas cosas de Buenos Aires a las que me dije "no puedo no ir." Juan Gatti es un fotógrafo, diseñador y artista plástico argentino que hizo muchos de los afiches de Almodóvar. Vive en Madrid, y el resto está en Google.

En esta nota voy a poner el acento sobre una de sus reflexiones. Cuenta Gatti en una entrevista, que lo que más le llama la atención cada vez que vuelve a argentina, es esta cosa de que el travesti, el transexual, el trangénero, o directamente, el gay, son vistos como fenómenos, o peor, como frikis, (término más madrileño). Nos cuenta que hoy por hoy en Madrid, cada uno de ellos o ellas, es reconocido por lo que hace, dice o piensa. No porque de noche se viste de mujer. Eso es un detalle. Y acá disgrego yo. Como es un detalle que tal artista hombre use sacos extravagantes o tal diseñadora de modas use tacones o se tiña de pelirrojo. Es un estilo, pero no es por lo cual son conocidos.

Fui a ver la muestra un día cualquiera, y fui también el día del cierre. En este día lo comprendí. El show era ver a hombres vestidos de mujer patinando en círculo alrededor del primer salón del Palais, música, y muchas selfies. No hubo palabras. La imagen era la noticia. Es como si los que iban a ver dijeran "Oh estos hombres cómo se atreven a vestirse de mujer, saquémonos fotos" Yo incluida, por supuesto. Los admiramos, pero ¿Por qué? Los creemos valientes. Y es al revés, tal vez. ¿Qué pasaría si aceptáramos a ese empleado bancario, a ese médico, o a ese diseñador, que en sus horas de día, vaya a trabajar así vestido, con tacones, maquillaje, labios pintados, y peluca? Ahí estaríamos realmente aceptando la diversidad, y estamos aún muy lejos de eso.-




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