Urgencias de encierro

Y en la cosa sencilla

le florece al manzano,

una flor de su ser.

*

En los pasillos

he visto,

seres pequeños

majestuosos

que,

como sombras

se fueron yendo

en vuelos de briza.

*

Donde hay

depredadores

en la tierra de uno,

existen mujeres

segadoras de lino

con el que hacen telas

para cubrir los cuerpos

de aquellas mujeres

sembradoras de trigo

con el que cocinan

el pan

para alimentar hijos

de las mujeres fecundas

de esta tierra.

*

Cae la escarcha,

los gorriones

desprovistos de plumas

llevan el frío en los huesos

y en lugar de cantar,

piden abrigo.

*

Esa ventana abierta

donde se es

artífice de lo que entra.

*

Entre

escombros busco

las razones,

y encuentro

ese espacio donde

mora lo inaudito.

*

Y este real

que se come

el cuerpo

hasta la poesía.

*

Con una angina agazapada

en la vergüenza alegre

de estar viva

como ese espectador interactivo

que entrará en breve a escena

miro triste en la arena,

cientos, miles, cayendo

como moscas.

*

Escribir

desde lo miserable

de la propia miseria

es surfilar,

en un coser

borde con borde,

tela sobre tela

para contener

hilachas de uno.

*

Y en eso

de dejar entrar

a quien golpeó la puerta

empobreció la casa

y quedó vacía.

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Estos poemas integran la nueva obra de la poeta, ensayista y psicoanalista Cecilia Elsa Collazo, Urgencias de encierro (Ediciones La yunta, Buenos Aires, 2020).