El azar y sus bordes
La marginalidad del desencuentro.
Así puede identificarse Vidas y milagros de ciertas provincianas, libro de cuentos de Kato Molinari (Alta Gracia, Córdoba), publicado recientemente por ediciones La yunta, como una arqueología del azar y sus bordes, que pone en evidencia lo genuino de los falsos arraigos.
Condición que se impone y adquiere la fisonomía de lo irremediable. Carácter que asimismo revela cuánto se puede persistir por amor a una creencia, a una idea, a una tierra, a una ciudad o pueblo, a otra persona. De ahí que lo falso pasa a ser verdadero.
No es sólo un giro narrativo y una deconstrucción del ser nacional, es también una denuncia de lo que queda tras la escisión en un mismo territorio entre las nervaduras de lo público y lo privado.
Denuncia que no implica pena, que desborda la culpa y que conlleva la fuerza ubicua de la feminidad.
Personajes entrañables, situaciones en las orillas de lo real, acciones que moldean el gesto milagroso, pero también perturbador, de saberse a punto de comenzar de nuevo.
Como sucede en El campanario y El pozo negro, por citar dos historias memorables que la autora expone con maestría.
Traza incluso las historias mínimas, casi imperceptibles, salvo para el ojo avizado de la poesía. Porque sólo ella, la excursus poética, rescata el aroma de lo olvidado, de lo hundido en su propio devenir.
En este sentido, Kato Molinari exhibe un lenguaje que da mayor sustancia al recuerdo de aquéllas imágenes fugaces y diminutas.
Labor que transita por el dolor de la belleza, por la crueldad de los animales, por las estepas del duelo, por el templo y la ruina de la piedad humana.
Como lo testimonian Vidas ejemplares, La palabra entonces, La proeza o Las yeguas azules.
En suma, la emergencia y procedencia de estos cuentos que integran el primer libro en narrativa, esculpido con precisión artesanal, de Kato Molinari, eximia poeta, focaliza en los pormenores de la batalla entre el ser y la nada, entre el azar y el tiempo, entre falsos lugares e identidades impostadas.-